sábado, 7 de agosto de 2010

Traileros, sangre y palomitas




FM
Hubo una temporada en mi infancia en que no podía dormir. Iba a la cama y simplemente me quedaba ahí, en la quietud de las sábanas y la oscuridad pero sin poder conciliar el sueño. Cuando los episodios de insomnio infantil se fueron haciendo más constantes y los remedios caseros para conciliar el sueño o incluso las gotas homeopáticas no resultaron, mi madre accedió a una peculiar petición de mi parte. Le pedí que me obsequiara unos audífonos que incluían una radio adaptada en cada uno los lados de las orejeras. Así, cuando las luces se apagaban y mi madre y mi hermana se disponían a dormir, yo encendía mi radio e iniciaba para mí un viaje inédito por carreteras y mundos distantes.

Resulta que por las noches sintonizaba un programa dedicado a los traileros. Eso, a los traileros que tenían que desvelarse en sus trayectos y a quienes los locutores trataban de mantener despiertos con las más diversas estrategias. El programa incluía diversas secciones que iban desde sangrientas, grotescas e increíbles historias de terror, hasta noticias extrañas, divulgación tecnológica y científica, notas de la farándula, recomendaciones de películas, información turística y, desde luego, un acompañamiento musical guapachoso y tropicalero, salpicado de recados o advertencias sobre tráfico y condiciones climáticas en las diversas partes del país. Los traileros por su parte se comunicaban a cabina para mandar saludos a sus novias, para pedir complacencias musicales o simplemente para opinar sobre los temas del programa.

Es así como durante un par de años (que fue lo que si no mal recuerdo me duró el insomnio), todas las noches hacía esos recorridos, a través del radio, a través de la voz de locutores y traileros por las imaginarias carreteras de un mundo que me parecía fascinante.

AM
Ya casi no escucho el radio ahora, pero cuando supe que Alicia Heredia estaría conduciendo un programa semanal de radio en TampicoCultural, me apresuré a sintonizarla en mi computadora. La primera emisión empezó algo tarde y por cuestiones de horarios no pude oírla completa. No hizo falta, un par de días después la escuché a través del podcast de la página.

“Sangre y palomitas” recibe al radioescucha con el característico sonido del microondas que avisa que podemos recoger nuestro rechoncho y humeante paquete, prestos a engullirlo. El formato es más o menos el tradicional: podremos escuchar algunas rolas o fragmentos de ellas (fondeando o sirviendo de pausas dentro del programa) y oiremos a sus dos conductoras (las mordaces Alicia Heredia y Maripili Hurtado) comentar algunas notas sobre televisión y cine (entre otros temas periféricos), así como interactuar con algunos miembros de la cabina.

Lo cierto es que si bien el formato y la idea en sí del programa no es nada nuevo bajo el sol, hacía un muy buen rato que no disfrutaba de una emisión tan desparpajada, tan sin falsos acartonamientos y con ese humor ligeramente ácido y mórbido tan característico en Alicia. La grata sorpresa para mí aquí ha sido Maripili Hurtado (con quien en realidad sólo había cruzado antes unas cuantas palabras en algunos eventos culturales), a quien descubro una (inter)locutora espontáneamente incisiva (si utilizara una metáfora para describir su rol en la mancuerna Heredia-Hurtado, sería como cuando las palomitas les pones limón y sal, no picante, sino sólo limón y sal, imaginen esa sensación en la lengua al probarlas, a eso es a lo que me refiero).

Así que desde ya me declaro fan de “Sangre y palomitas”. El horario es un poco difícil para mí (jueves de cuatro a cinco), pero para eso está siempre el podcast en TampicoCultural. Sintonícenlas, de verdad se los recomiendo (esta recomendación no aplica para pacatos, pudibundos y susceptibles).

1 comentario:

Unknown dijo...

Hola, Sara:
Muchas gracias por escuchar el programa y recomendarnos.
Te mando un abrazo =)